«Creo
que a diferencia de Hiroshima no tiene ni un poema dedicado. En
realidad, lo más significativo que recuerdo haber leído u oído
sobre Nagasaki fue una conversación que un alto asesor civil del
gobierno norteamericano tuvo con los generales del Pentágono que
habían decidido utilizar la bomba atómica. La reunión tuvo lugar
en una sala de la Casa Blanca y tenía como propósito explicarle a
ese asesor y sus pares, las razones y la lógica que habían llevado
a Truman y al alto mando norteamericano, a incursionar en la nueva
tecnología de destrucción.
Le
explicaron que la resistencia japonesa en el Pacífico había sido
peor que encarnizada, que los soldados del Sol Naciente estaban
imbuidos de un fanatismo tal, que se lanzaban en aviones suicidas
sobres los barcos americanos (los famosos kamikazes), se arrojaban de
acantilados -luego de lanzar a sus niños prefiriendo ese fin a
rendirse, etc. Con semejante tozudez, llegar hasta las islas
principales del Japón era un objetivo alcanzable, sí, pero costaría
las vidas de miles, tal vez decenas de miles de soldados norteamericanos, y esto no parecía lógico si podía evitarse.
Terminadas
las explicaciones de los generales, el asesor se quitó los lentes
con la mano izquierda, y mientras los depositaba lentamente sobre la
carpeta de cuero con el logo del escudo americano grabado en
bajorrelieve conteniendo los mapas y gráficos que soportaban las
explicaciones recibidas, se tomó la mejilla con la mano derecha.
Demoró apenas un instante más para humedecer los labios con la
punta de la lengua, al cabo de lo cual respondió, o mejor dicho
repreguntó:
- Ok,
I can understand one bomb, but why two?
(Ok,
yo puedo entender una bomba, pero, ¿por qué dos?)
En
los tres días que transcurrieron entre Hiroshima y Nagasaki el Japón
no pudo ni siquiera entender técnicamente que cosa le había caído
arriba, menos aún, pasar a través del proceso mental duro y difícil
que necesitaba un imperio soberbio como el japonés para aceptar el
concepto de derrota. Japón se rindió después de dos bombas
atómicas como se hubiera rendido después de una, si se le hubieran
dado dos semanas para entender lo ocurrido y evaluar los daños.
Nagasaki no tuvo nunca justificación técnica. Tanto es así, que yo
al menos no he leído nadie que la haya siquiera intentado.»
Bernardo Frau en "Una breve historia del mundo"
« On the morning of August 9th, 1945, at about 7:50 A.M., Japanese time, an air raid alert was sounded in Nagasaki, but the "All clear" signal was given at 8:30. When only two B-29 superfortresses were sighted at 10:53 the Japanese apparently assumed that the planes were only on reconnaissance and no further alarm was given. A few moments later, at 11:00 o'clock, the observation B-29 dropped instruments attached to three parachutes and at 11:02 the other plane released the atomic bomb.»
Extraído de
US Army Corps of Engeineers Oficial Report